(los nephilim son humanos con almas de otras razas conocidos como herederos de otra era)
Los Nephilim son también las almas de las sombras, ya que pertenecían a una raza ligada naturalmente a las tinieblas. A pesar de ser también una de las dos etnias dominantes, su número es realmente escaso ya que en vida eran muy pocos. Como los elfos, su esencia es marcadamente sobrenatural y la magia está muy ligada en ellos, en especial hacia las mujeres.
Son siempre personas muy agraciadas físicamente. Tienden a ser altos y raramente miden menos de uno ochenta los hombres y uno setenta las mujeres. Tienen una complexion perfecta y tampoco engordan nunca. Se caracterizan por ser muy pálidos y por tener el pelo de colores oscuros o con tonos muy claros, como negro o gris ceniza. Sus ojos son claros y tienen una tonalidad ligeramente rojiza cuando la luz se refleja en ellos. No son más longevos que los humanos normales, pero mantienen todas sus habilidades físicas hasta bien entrados los noventa, momento a partir del cual empiezan a envejecer muy rapidamente.
El alma Duk'zarist se refleja mucho mñas en su personalidad que en los otros Nephilim. Incoscientemente, aun siguen sirviéndose del código de conducta que seguian en vida. Son excepcionalmente competitivos en cualquier campo, tanto en los intelectuales como en los físicos, aunque tienden a desarrollar mas estos últimos. Se sienten muy atraidos por la fueza y admiran normalmente a cualquier individuo poderoso por si mismo, aunque eso solo aumenta sus deseos de superarle. Es muy dificil que admitan que no son capaces de hacer algo y para que pidan ayuda deben de encontrarse en una situación muy desesperada. Aunque no les gusta la soledad, son individualistas a la hora de actuar. Sienten devoción por aquellos a los que realmente aprecian, pero nunca muestran de una manera abierta sus emociones. Son maquinadores y manipuladores pero a la vez también muy impacientes, lo que les provoca un enorme conflicto a la hora de decidir entre actuar inmediatamente o esperar un momento mas propicio.
Como los Sylvain, los sueños sobre su anterior existencia los asaltan comúnmente y, aunque no llegan a perturbarles del mismo modo que a estos, si siembran al menos inquietud en ellos.